Antes de apuntarte a la regata has de decidir en que tipo de barco vas a navegar.
Existen 4 clases de barcos para elegir, A, B,C y D.
La clase A es la de los barcos más grandes con muchas velas. La clase D ya son barcos más pequeños y con velas menos complicadas.
¿Cúal elegir? Pues eso depende un poco de lo que tu quieras. Navegar en un clase A está muy bien porque no se mueve mucho y te mareas menos. Además son barcos con mucha historia y muy bonitos por dentro. Los cuartos son espaciosos, a veces con duchas en la habitación. Los comedores son grandes y todo es mucho más cómodo. Como punto negativo habría que decir que como ningún barco suele tener esos tipos de velas todo lo que aprendas no lo vas a poder aplicar facilmente en el mundo real si por ejemplo alquilas un barco para pasar dos semanas navegando por las islas Griegas.
Un barco pequeño, de clase C o D te permite aprender más, participar en las maniobras de una manera más directa. Lo malo es que con mar fuerte te mojas si hay olas y no es nada confortable para dormir.
A mi en este viaje me interesaba más la parte del aprendizaje, así que me enrolé en el Thermopylae clipper. Un clase C de 18 metros.
Publicado con Blogsy